Mia tiene diecisiete años, y ha sufrido un accidente de coche. Toda su familia ha muerto y ella se ha quedado en coma. Mientras todos sus seres queridos pasan para hacerla compañia, ella no hace mas que preguntarse, si realmente deberia quedarse.
Sin palabras. Decidi leer este libro ya que habia visto que tenia muy buenas criticas, y su trama a primera vista es simple, pero cautivadora.
Una de las cosas que mas me ha gustado es, que es un libro realista. Los pensamientos y acciones de la protagonista son los que tendría cualquier persona racional. No nos presenta fantasias sobre una situacion como esta, sino que a traves de las palabras de la autora, llegamos a compartir el dolor de su familia.
Otra cosa bastante significativa, es, que no se trata de un libro pesado. La autora se toma su tiempo para explicarnos las cosas, para que empaticemos con cada uno de los personajes, y derramemos alguna que otra lagrima. No nos tiene varias paginas con diagnosticos medicos, o con simples pensamientos o divagaciones. Es un libro muy completo que no le falta nada.
Su segunda parte, Where she went, tambien lo he leido. Habia visto en otras paginas, a gente diciendo que esa parte sobraba y que no les habia gustado. Debo estar en desacuerdo.
La segunda parte de esta novela me ha parecido totalmente necesaria, ya que aqui termina de aclararnos los interrogantes sobre Mia y Adam, sobre como ha llevado su dolor, y demas.
Tampoco ha sido una lectura pesada, la autora ha seguido la estela de la primera, enamorandonos mediante palabras.
Una gran novela.
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